Alta costura sobre ruedas: el Auburn 851 SC Boattail Speedster (1936)
Una joya del diseño americano que une la elegancia del Art Déco con la potencia del supercargador.
En los años treinta, mientras el mundo atravesaba los años difíciles de la Gran Depresión, la industria del automóvil se atrevía a soñar. El resultado de esa audacia fue el Auburn 851 SC Boattail Speedster, una auténtica obra de arte sobre ruedas que hoy puede admirarse en el Museo del Automóvil y la Moda de Málaga.
Más que un coche, es una declaración de estilo: una fusión perfecta entre ingeniería, moda y espíritu innovador.
Una “cola de barco” que marcó tendencia
Su nombre lo dice todo: Boattail Speedster hace referencia a la peculiar forma de su parte trasera, que se estrecha hasta recordar la popa de un barco de lujo. Este diseño, firmado por el visionario Gordon Buehrig, respondía a la estética del Streamline Moderne, un movimiento que apostaba por líneas aerodinámicas y siluetas fluidas que transmitían movimiento incluso estando detenido.
El resultado fue un automóvil que parecía moverse con el viento, un icono de elegancia y velocidad.

Potencia con alma de superdeportivo
Bajo su estilizada carrocería latía un motor de ocho cilindros en línea Lycoming con compresor (supercharged), capaz de desarrollar unos 150 CV, una cifra impresionante para su época.
Gracias a él, el Auburn 851 SC superaba los 160 km/h, algo que muy pocos coches podían presumir en 1936.
Cada unidad llevaba en el salpicadero una placa con el nombre del piloto Ab Jenkins, garantizando que el vehículo había sido “probado” a esa velocidad: un detalle más de marketing y mística que convirtió a este modelo en leyenda.
Un lujo en tiempos difíciles
A pesar de su apariencia de lujo, Auburn intentó situarse entre la élite y la accesibilidad. Su creador, E. L. Cord, buscaba ofrecer prestaciones de ensueño a un precio relativamente razonable.
En plena Gran Depresión, el 851 SC Boattail era un símbolo de esperanza y de gusto refinado: un recordatorio de que la belleza y la innovación podían seguir existiendo incluso en los momentos más duros.
Moda, arte y velocidad
El Auburn 851 SC Boattail Speedster encarna a la perfección el espíritu que da nombre a nuestro museo: la unión entre Automóvil y Moda.
Su carrocería art-déco recuerda a los diseños de alta costura de los años 30: curvas elegantes, líneas ajustadas, materiales nobles. Es un automóvil que podría desfilar en una pasarela tanto como rodar por una carretera.
Esa conexión entre forma, función y belleza hace de este modelo una pieza clave en nuestra colección.

Legado de un icono
El 851 SC fue uno de los últimos modelos fabricados por Auburn antes de cerrar sus puertas en 1937. Sin embargo, su legado ha perdurado. Su silueta “cola de barco” ha inspirado a diseñadores y fabricantes durante décadas, y su espíritu vive en cada coche que combina potencia con estilo.
No es de extrañar que hoy sea considerado uno de los automóviles más bellos de todos los tiempos.
Una joya para admirar en Málaga
Visitar el Museo del Automóvil y la Moda de Málaga es sumergirse en una historia de creatividad y elegancia. Frente al Auburn 851 SC Boattail Speedster, no sólo contempla un coche, sino una obra de arte en movimiento, una pieza que celebra la velocidad, el diseño y el glamour de una época irrepetible.








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