sombreros
En París, en 1934, la Cámara de Comercio consideró los sombreros de alta costura como obras de arte, equivalentes a las obras de arte o esculturas que merecen ser preservadas a lo largo del tiempo.
Es por esto que nosotros nos consideramos guardianes de cientos de estas joyas, símbolos del lujo que distinguían a la persona que los usaba. Se trata de sombreros y tocados exclusivos ya que no se producían masivamente y por lo tanto, es difícil encontrar dos idénticos.